
Siempre pensé en tener un blog pero ¿qué iba a escribir? ¿lo iba a leer alguien? ¿sería un fracaso?
Recuerdo que por mucho tiempo me hice esas preguntas y al final llegaba a la conclusión de que probablemente no sería muy exitoso.
Sin embargo, un día me encontré en FB con una entrada de mi estimado amigo "Gringo" a quien en realidad en ese momento tenía poco de conocer pero con quien había pasado experiencias muy simpáticas, gratas y anecdóticas (Maná, Vara Blanca, la guitarra y el paintball nocturno). Era del blog que él mantenía, donde no solo escribía sus cosas sino que compartía otras interesantes.
Esto me llevó a comentarle que yo siempre había querido también tener un blog pero que creía que nadie lo leería, no olvido sus palabras: "uno escribe primero para uno mismo, cualquier otra persona, aunque sea una que lo lea, ya es ganancia".
Dicho y hecho, a los pocos días ya tenía mi primer entrada en la que hablaba sobre el tema que más me apasiona: viajar. Fue un desahogo, fue increíble saber que podía contar un poco como me sentía y podía expresarme a mi misma cosas que me eran importantes.
Durante momentos críticos me ha acompañado, me ha permitido compartir, con personas al azar y personas cercanas, imágenes, palabras o sonidos que me emocionan aunque no sean de mi autoría, es un álbum de sensaciones justo el nombre con que bauticé mi blog.
No se me olvida que ambos estábamos lejos de Costa Rica en esos momentos, cada uno con sus loqueras, cada uno con sus dudas, pero mi muy querido amigo me abrió una puerta a un mundo que silencioso se convierte en grata reflexión.
Cuando veo los lugares de donde leen mis entradas y aquellas más leídas me pongo feliz, así sean 3000 muy poquitas en comparación con grandes bloggeros, porque al final lo escribo para mi y el resto es ganancia :)
¡Gracias! Ah... Y todavía me debés la apuesta.
PD: Vos siempre tenés buenas recomendaciones
PD: Vos siempre tenés buenas recomendaciones
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